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¡PARA!
Detén la acción.
Haz silencio y pide PAUSA.
Así evitas que la situación continúe escalando.
ALÉJATE
Muévete del lugar.
Más adelante llegará el momento adecuado para reaccionar, responder y escucharse.
UBÍCATE
Elige un lugar donde puedas ordenar pensamientos y emociones.
SINTONÍZATE
Identifica la fuerte emoción y suéltala.
Harás espacio a la calma.
Ordena tus pensamientos y decide
tus próximos pasos.
ACÉRCATE
Ahora es posible lograr una conversación respetuosa enfocada en construir las mejores soluciones.
Has inicio un proceso positivo de solución
de conflictos. ¡Adelante!
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